Por Arq. Rodolfo Eduardo Medina.
Mohenjo Daro es una misteriosa Ciudad
encontrada bajo tierra en el valle del río Indo, ubicada en Pakistán. El
asentamiento presenta anomalías muy extrañas, pues ahí se descubrieron miles de
cadáveres enterrados, víctimas por una muerte repentina relacionadas con “fuego
que vino del cielo”.
Algunos expertos sugieren que ciertos "alienígenas"
probablemente fueron los responsables hace más de cuatro milenios.
En el año 1902, bajo metros y metros de
tierra, el arqueólogo británico John Marshall descubrió unas ruinas urbanas en
Pakistán que revelarían a la Cultura del Valle del Río Indo.
Los estudios de John Marshall habrían sido
completados después de su muerte por otros investigadores como Wheeler,
Marshall Mackay y Sahni, además de arqueólogos indios y pakistaníes reagrupados
en el año de 1960.
En 1980 la Unesco declaró las ruinas como
Patrimonio de la Humanidad y se denominó como “La primera ciudad planificada”,
debido a su desarrollo avanzado, pero este no es el motivo al que debe su fama,
sino a los extraños y misteriosos eventos que rodearon su destrucción. La historia oficial señala que el motivo que propició su abandono final fue probablemente un cambio drástico en el curso del río Indo.
El halo de misterio alrededor de la ciudad
creció acorde a lo revelado por distintas investigaciones realizadas a través
de muchos años. Pues, en pleno desierto pakistaní se descubrieron miles de
cadáveres enterrados, víctimas de una muerte repentina. En el lugar se hallaron
radiaciones que superan 50 veces la permitida (o al menos la soportable por un
ser humano) además de varias piedras cristalizadas y fusionadas unas con otras,
lo que alimenta las sospechas de los expertos en la ufología, quienes aseguraron
que habría existido un ataque nuclear por parte de una civilización
extraterrestre, un ataque que habría terminado en un abrir y cerrar de ojos con
los habitantes de Mohenjo Daro.
“Montículo de cadáveres” … Ese podría ser el
significado detrás del nombre Mohenjo Daro.
El nombre surgió a partir del hallazgo
inusual de centenares de cuerpos amontonados. El investigador David Davenport escribió un
libro en el que expuso los resultados de los análisis que arrojaron los
hallazgos. Los cadáveres mostraron síntomas de envenenamiento por radiación. La
forma y poses en que se encontraron los esqueletos indicaría que la muerte les
cayó encima, aparentemente en plena huida del lugar: en un caso, hasta tres
miembros, de lo que se supone era la misma familia, aparecieron boca abajo
tomados de la mano; otros dos individuos fueron descubiertos abrazados en plena
calle, sin haber alcanzado a refugiarse.
Asimismo, hallaron evidencias de lo que
parecía ser el epicentro de una gran explosión, donde casi todas las
estructuras de la ciudad estaban arrasadas y el terreno con capas cristalizadas,
síntomas inequívocos de que la destrucción se originó desde ese punto.
También se encontraron piedras negras
cristalizadas que, luego de ser analizadas, demostraron eran jarrones de barro
quemados a más de 1600° centígrados, algo así solo podría haberse generado con
una altísima exposición al calor y a la radiación.
Entonces, qué o quién pudo haber generado
tanta radiación?
En los relatos antiguos de la India, principalmente
en sus textos sagrados (los Vedas) se han guardado innumerables secretos que
han dejado ciertos indicios sobre el tema; en donde además se habla de la
existencia de “máquinas” o “aparatos extraños” que descendían de las estrellas
y podían provocar explosiones mediante artefactos que, comparados con nuestros
tiempos, podrían ser similares a los actuales misiles.
Estos textos Sagrados se remontarían a una
época de 10.000 años a.C. y avalarían la teoría que afirma que seres
alienígenas han visitado la Tierra en el pasado.
Quizá por eso, Mohenjo Daro no sería la
primera metrópoli de la antigüedad en haber sufrido un ataque que llegaba desde
el cielo; ya que en esa misma dirección (en el desierto de África), se
descubriría una extensión inmensa de arena cristalizada con un sorprendente
color verde. Dicho detalle no pasó desapercibido para los investigadores, pues
determinaron que se debía a un efecto logrado solo con altísimos y mortales
niveles de temperatura. Tiempo después, se hizo la comparación de los restos
materiales de la primera bomba atómica detonada en Alamogordo, Nuevo México con
la arena cristalizada en el desierto de África. Dicha comparación indicó que el
impacto de la bomba detonada en Nuevo México, causó la misma cristalización de
color verde hallada en el desierto africano.
Con todas estas investigaciones ya realizadas
en los años 60s, y considerando que la bomba nuclear fue creada en nuestro
planeta por el Dr. Robert Oppenheimer (el padre de la bomba atómica) en 1945,
la pregunta de todo este misterio sería: Cómo es posible que una civilización
que existió hace más de 4.000 años haya sido aniquilada por lo que, a todas
luces, parece ser una explosión con el mismo poder destructivo de un
dispositivo nuclear?
En este contexto, y años después de las pruebas
nucleares en Alamogordo, el Dr. Oppenheimer daba una conferencia en una
universidad cuando un estudiante preguntó si era la primera prueba atómica
realizada.
El Dr. respondió: "Sí, en los tiempos
modernos, sí".
El tiempo y la
historia de la Tierra parecen haber borrado los detalles de lo que realmente
ocurrió en Mohenjo Daro. Pese a lo cual, el misterio continúa creciendo,
alimentado por los investigadores y creyentes que afirman una realidad
innegable, como son esos registros de visitas extraterrestres que allí aparecen
como mudos testigos, registros que se encuentran esparcidos a lo largo y ancho
de todo el planeta.
Por otra parte, cabe señalar que el valle es un lugar muy caliente, donde habitualmente suelen registrarse temperaturas muy altas: el 26 de mayo de 2010 se midió un récord de 53,5°C.
En el mundo notafílico, el único billete que posee un registro gráfico del sitio es el pakistaní DIEZ RUPIAS, con una imagen panorámica sobre el reverso.
Billete de 10 Rupias Pakistaníes.
Título: State Bank of Pakistan.
ND(1976-1982).
Anverso: Mohammad Ali Jinnah.
Anverso: Mohammad Ali Jinnah.
Reverso: Sector de Mohenjo Daro.
Printer: Pakistan Security Printing Corporation.
Tamaño: 140x73 mm.
Pick SCWPM-29.
Que interesante relato, gracias por compartirlo
ResponderEliminarGracias a vos tb, Abuelosurf
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